Con cuarenta minutos de retraso comenzó el festejo celebrado ayer en la localidad cordobesa de Cardeña, y digo que empezó con retraso debido a la tormenta tan grande que descargó sobre este pueblo, nadie se creía que cuando estábamos saliendo de Córdoba, en torno a las cinco de la tarde, estábamos a cuarenta y seis grados de temperatura, y media hora más tarde que sería lo que avanzaríamos y estaríamos por Montoro cayera el diluvio y la temperatura se pusiera a veinte grados, después de esa tregua afortunadamente donde estaba ubicada la plaza es en el campo de futbol y tiene un buen drenaje, eso hizo avanzar aún más la tarde.
Pues bien dicho todo esto y a partir de ahí, se lidiaron cinco novillos, el primero de Antonio Ordoñez para rejones y el resto de toros de la plata para la lidia a pie, desiguales de presentación y comportamiento, el mejor el quinto, quizás el más descarado de la tarde.
Abría cartel el rejoneador Francisco José Alcázar que lo costó mucho trabajo acoplarse a las arrancadas del animal, todo hay que decirlo el piso estaba recién restaurado el animal se resbalaba y aquello hacia que el chaval tuviera cierta inseguridad, no me disgustó Francisco José, le falta mucho oficio pero tiene buen gusto toreando a caballo, además le llegaba mucho al novillo toreando de costado y por momento llegó incluso a clavar un par al estribo, con la espada fue un autentico sainete y eso hizo que su faena se quedara en una ovación, y una vuelta al ruedo por su cuenta.
Sergio Sanz a pesar de lo poco que el muchacho torea estuvo muy voluntarioso, y jugándose varias veces los muslos, ante un novillo que no era malo pero que descomponía mucho al pegar unos derrotes muy fuertes al final del muletazo, además muy parado que le costaba mucho pasar, Sergio basó su faena en la cercanía dándole los terrenos oportunos a este, la gente así lo vio y por eso después de un pinchazo y una estocada se llevó las dos orejas.
José Antonio cejudo “el güejareño” se encontró a un novillo que para mi opinión le hizo una faena totalmente al revés de cómo la vimos todo el mundo, muy acelerado, y muy soso sin llegar a calar en ningún momento los tendidos, aún así después de media estocada se le concedió una oreja.
Palomo Linares tiene buen gusto toreando, si hacer grandes cosas, pero lo vi muy suelto por la plaza, hizo dos faenas, la primera parte fue de aficionado y la segunda para el público, el novillo sabía perfectamente lo que se dejaba atrás, era entonces cuando antes de terminar el muletazo arrebañaba y no dejaba estar cómodo en ningún momento a Palomo, hizo un esfuerzo grande, cuando vio que no daba para más, sacó recursos y ahí es donde el público se entregó, se adornó con varios molinetes y aquello hizo que la gente terminara de entregarse, un espadazo le valió las dos orejas.
Hacía tiempo que no lo veía, me lo contaban pero nunca llegando a pensar la dimensión tan grande de este chaval, amigos Rafa Reyes quiere ser torero, además tiene las ideas muy claras, ayer este joven cordobés me puso el bello de punta, la garganta se me secó por momentos, jaleando y coreando a Rafa Reyes, que mano izquierda y buen gusto toreando, señores que pedazo de torero ante un novillo que había que echarle pan aparte, el más grande de la tarde, todo hay que decirlo también el mejor, pero no se puede estar mejor delante de un novillo, ayer se centró y se vació por dentro por momentos pensaba que estaba toreando de salón, obviamente, le falta mucho bagaje, pero que para el poco tiempo que lleva en esto y, aquel morlaco tan grande estuvo cumbre, mejor todavía, se tiró a morir detrás de la espada se llevó una tremenda voltereta que lo dejó mermado, pero el chaval lo tiene claro ¡quiere ser torero! Las dos orejas y a hombros de la plaza, enhorabuena maestro.
La plaza registro algo menos de media entrada.
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