Arrancó la feria de Córdoba,
y el tema pinta mal, muy mal, no se sabe
si fue el tiempo hizo que a la gente la
echara para atrás, el caso es que ayer en la primera de los califas, fue una
tarde un poco extraña, poco público un día horrible marcado por la lluvia y
sobre todo el frío, mucho frío hacía ayer en “los califas”.
En el cartel se anunciaban
cinco toros del “Pilar” y uno de Moisés Fraile muy justitos de presencia,
fuerza y juego.
Abría cartel Finito de
Córdoba que vio como sus dos enemigos fueron devueltos por inválidos y
sustituidos por otros de la “Palmosilla” el torero en el primero de su lote
logró sacar varias tandas de muletazos sobre todo por el pitón derecho, que
quizás fuera lo mejor de la fría tarde, la gente estuvo con él mientras el animal
duró, estuvo voluntarioso le pego una estocada, y la gente le pidió la oreja
con fuerza, cosa que el presidente no lo vio así, el tuvo que conformarse con
saludar desde el tercio, en el segundo la cosa cambió, otro invalido que el
presidente no quiso devolver y con este el “fino” no estuvo cómo en ningún
momento, lo mató como pudo, necesitó de varios golpes del verduguillo, y su
labor fue silenciada.
Llegaba a Córdoba Juan José
Padilla, el torero jerezano estuvo muy voluntarioso ante sus dos enemigos, donde
estuvo muy bien en banderillas, colocando siempre en la cara de los toros, y
esto hizo poner a la gente en pie, Padilla ayer estuvo en lo que es, un pedazo
de torero, con garra y firmeza, demostrando que no le afectado para nada la
gravísima cornada de Zaragoza, porque la preparación física que tiene es
espectacular, ayer lo vimos en Córdoba hecho un tío y pendiente de todo,
quites, colaborando con los compañeros en algún que otro apuro y hasta haciendo
de cabestrero, porque ayer ayudó al cabestrero a encerrar a uno de los toros de
su compadre, por eso las dos orejas y salida ha hombros por la puerta grande
con los chavales de la escuela fue merecidisima.
Cerraba el cartel el Fandi
que en el primero estuvo voluntarioso y aseado sobre todo en banderillas, en la
muleta la faena fue perdiendo fuelle y su labor fue silenciada, el que cerraba
plaza al granadino lo vimos muy desconfiado en todas las suertes, pero a la
gente le gusta, sobre todo el tercio de banderillas, y después una faena donde
no estuvo cómodo, lo mató de una estocada y cortó una oreja.
Al final del festejo el
maestro Padilla salió en volandas por los alumnos de la escuela taurina de
Córdoba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario